Termitas de la madera seca  Kalotermes flavicollis

Aspecto: Cuerpo de color marrón oscuro excepto el protórax que es amarillo. Los soldados presentan mandíbulas muy singulares y el tamaño en general es de tres veces el de un termita subterráneo. El principal señal que nos permite identificar este tipo de termitas son los gránulos fecales que necesariamente desprenden en el exterior y que se observan cerca de las maderas infestadas, en forma de arena.

Hábitat y comportamiento: A diferencia de los termitas subterráneas, los de la madera seca tienen sus nidos en el interior de sus fuentes de alimentos, en el interior de la madera que atacan. Forman parte de pequeñas colonias 1000-5000 individuos, y son las especies de termitas más primitivos, donde falta una casta real de obreras, muy presente en Reticulitermes. No es habitual encontrar este tipo de termita en el interior de una vivienda, en el interior de algún marco de puerta, ventana o elemento estructural. Sin embargo, se dan algunos casos, generalmente en elementos en contacto con alguna fuente de humedad cercana al exterior del inmueble. En estos casos, la entrada de las termitas se lleva a cabo a través de sus vuelos nupciales -de agosto-diciembre-, procedentes de algún árbol infestado cercano a la propiedad. Aunque se les identifica con ‘madera seca’ realmente necesitan una madera con un elevado grado de humedad en su interior, de lo contrario, se mueren.

Ciclo biológico: Sus sociedades están compuestas principalmente de larvas, ninfas, falsas obreras, soldados, alados y sexuados funcionales, que aparecen en la colonia en función de las necesidades y la formación está regulada por un complejo sistema hormonal.

Importancia sanitaria y riesgos: Kalotermes flavicollis es una especie problemática en España porque causa daños en cultivos leñosos (árboles frutales y viñedos), también en árboles urbanos como los plataneros y es también causa de destrucción de estructuras de madera en inmuebles urbanos.